Por estos años deberíamos estar repensando nuestros modelos educativos, y no en cómo medicar a los niños para que se queden quietos... pero la tendencia viene por esta última opción.
El uso de Ritalina en Uruguay ha venido creciendo de manera sorprendente y descontrolada.
En esta excelente presentación, Ken Robinson analiza los modelos educativos.
[Video: Ken Robinson]
. .
Gabriel Budiño
▼
domingo, 24 de octubre de 2010
lunes, 18 de octubre de 2010
¿Vale la pena meterse en las Redes Sociales?
Facebook no fue la primer red social - ni mucho menos - pero sin dudas hay un antes y después de esta creación de Mark Zuckerberg (pero, ¿todo el mérito es de este joven norteamericano nacido en 1984?).
La semana pasada estuve en el pre-estreno de "The Social Network" (distribuida en hispanoamérica como "Red Social") y realmente vale la pena verla.
Allí no se habla de redes sociales, pero si de emprendurismo, universitarios de elite, negocios en Internet que crecen aceleradamente, el impacto de Facebook, los juicios multimillonarios y la vida de algunas personas.
No soy crítico de cine, así que no comentaré mucho más de la película que puedo resumirla en "me gustó" y "la recomiendo".
El dialogo de la primer escena (incluso antes de los títulos) es genial, y los toques geek le gustarán a muchos de nosotros, aunque la puede disfrutar alguien que ni siquiera tenga cuenta en Facebook.
En la película - guiada por los juicios que enfrentó Zuckerberg - queda claro como la red social explota a partir de la idea de la "privacidad compartida", la pertenencia a grupos sociales y el "chusmerío barato", pero quien haya seguido lo que está pasando con Facebook (y no está en la película) sabrá que todo eso ya se ha capitalizado en favor de los negocios, y que hoy las redes sociales son un elemento más de la mezcla de marketing.
Hoy las empresas analizan los riesgos de estar y de no-estar en las redes sociales como Facebook y Twitter, al punto que un rol como el de Community Manager no es algo tan raro a pesar de ser totalmente novedoso (y ya hay hasta quien se anima a dictar un posgrado en estos temas).
[mi presencia en el pre-estreno de la película debe agradecerse a The Electric Factory vía Tan Conectados, y a la gentileza de @vrodes que me cedió su premio afectada por una gripe]
.
.
La semana pasada estuve en el pre-estreno de "The Social Network" (distribuida en hispanoamérica como "Red Social") y realmente vale la pena verla.
Allí no se habla de redes sociales, pero si de emprendurismo, universitarios de elite, negocios en Internet que crecen aceleradamente, el impacto de Facebook, los juicios multimillonarios y la vida de algunas personas.
No soy crítico de cine, así que no comentaré mucho más de la película que puedo resumirla en "me gustó" y "la recomiendo".
El dialogo de la primer escena (incluso antes de los títulos) es genial, y los toques geek le gustarán a muchos de nosotros, aunque la puede disfrutar alguien que ni siquiera tenga cuenta en Facebook.
En la película - guiada por los juicios que enfrentó Zuckerberg - queda claro como la red social explota a partir de la idea de la "privacidad compartida", la pertenencia a grupos sociales y el "chusmerío barato", pero quien haya seguido lo que está pasando con Facebook (y no está en la película) sabrá que todo eso ya se ha capitalizado en favor de los negocios, y que hoy las redes sociales son un elemento más de la mezcla de marketing.
Hoy las empresas analizan los riesgos de estar y de no-estar en las redes sociales como Facebook y Twitter, al punto que un rol como el de Community Manager no es algo tan raro a pesar de ser totalmente novedoso (y ya hay hasta quien se anima a dictar un posgrado en estos temas).
[mi presencia en el pre-estreno de la película debe agradecerse a The Electric Factory vía Tan Conectados, y a la gentileza de @vrodes que me cedió su premio afectada por una gripe]
.
.
jueves, 14 de octubre de 2010
Amor por el Chocolate (pero no por el cliente)
En abril de este año, Jorge compró un chocolate Ricard en una sucursal del supermercado Multiahorro. Encontró un gusano que se estaba comiendo el chocolate antes que él, así que contactó al fabricante del chocolate, hizo el reclamo en el supermercado y lo atendieron muy bien en ambos casos.
El servicio al cliente de Bimbo/Ricard fue muy generoso: le pidieron los datos del producto, agradecieron que enviara el chocolate en mal estado, tomaron el reclamo y unos días después se disculparon con una canasta de sus productos (obviamente en perfectas condiciones).
En el supermercado quizás no fueron tan formales, pero tomaron nota de la situación, dándose por enterados que toda la caja estaba igual.
Hasta aquí es algo que puede pasar. Un problema en el envasado, fallas en la cadena de frío, tratamiento inadecuado del distribuidor.... son cosas que la Ley de Murphy se asegura que pasen si es que nadie pone los controles suficientes.
Algo no tan común, pero por suerte ocurre de vez en cuando, es ver a las empresas tomar el reclamo y agradecer al cliente - incluso con un regalo por ayudar a mejorar y a detectar errores.
¿Pero qué pasó unos meses después?
El mismo Jorge, en el mismo supermercado, se atrevió a comprar de nuevo un chocolate Ricard, y se encontró con que otra vez su chocolate tenía un gusano.
Enorme la sorpresa cuando vio que se trataba de la misma partida que él había reportado (el número de lote es mágico para esas cosas).
Las empresas fallaron en el punto más importante del diálogo con el consumidor: tomar acciones correctivas.
Escucharon al cliente, lo trataron bien, pero no hicieron nada más.
El supermercado no quitó los chocolates de la góndola, ni investigó las causas, ni implementó controles o procedimientos para que no vuelva a pasar. Pero lo que es peor: el fabricante no concurrió al supermercado, no sancionó ni se aseguró que SU imagen, SU producto, SU marca no se volvieran a ensuciar por un problema que quizás es del distribuidor.
Esto no estaba fuera de su alcance, esto estaba en sus manos, gracias a un cliente preocupado, atento y comunicativo.
Pero ojo: ese mismo cliente, hoy publica una vez más en su blog el problema, y ahora quien busque "Chocolate Ricard" en Google, verá que este tema es uno de los primeros resultados, y la foto del chocolate con gusanos es también de las primeras en Google Imágenes. Más todavía cuando Ricard no tiene sitio en Internet (si tu callas, hablan tus clientes por ti).
¿Para qué sirve el CRM y el marketing relacional si no hacemos nada con lo que aprendemos?
Pensaron seguramente en regalar una canasta de productos para "dejar contento" al cliente, pero se olvidaron del mundo interconectado y la web 2.0: Ahora no solo tienen contaminada una partida de chocolates, sino a todos los clientes que puedan escuchar sobre la marca en Internet.
Vuelvo a lo mismo: Hay que escuchar... y actuar!
[La imagen es parte del video del segundo gusano]
.
.
El servicio al cliente de Bimbo/Ricard fue muy generoso: le pidieron los datos del producto, agradecieron que enviara el chocolate en mal estado, tomaron el reclamo y unos días después se disculparon con una canasta de sus productos (obviamente en perfectas condiciones).
En el supermercado quizás no fueron tan formales, pero tomaron nota de la situación, dándose por enterados que toda la caja estaba igual.
Hasta aquí es algo que puede pasar. Un problema en el envasado, fallas en la cadena de frío, tratamiento inadecuado del distribuidor.... son cosas que la Ley de Murphy se asegura que pasen si es que nadie pone los controles suficientes.
Algo no tan común, pero por suerte ocurre de vez en cuando, es ver a las empresas tomar el reclamo y agradecer al cliente - incluso con un regalo por ayudar a mejorar y a detectar errores.
¿Pero qué pasó unos meses después?
El mismo Jorge, en el mismo supermercado, se atrevió a comprar de nuevo un chocolate Ricard, y se encontró con que otra vez su chocolate tenía un gusano.
Enorme la sorpresa cuando vio que se trataba de la misma partida que él había reportado (el número de lote es mágico para esas cosas).
Las empresas fallaron en el punto más importante del diálogo con el consumidor: tomar acciones correctivas.
Escucharon al cliente, lo trataron bien, pero no hicieron nada más.
El supermercado no quitó los chocolates de la góndola, ni investigó las causas, ni implementó controles o procedimientos para que no vuelva a pasar. Pero lo que es peor: el fabricante no concurrió al supermercado, no sancionó ni se aseguró que SU imagen, SU producto, SU marca no se volvieran a ensuciar por un problema que quizás es del distribuidor.
Esto no estaba fuera de su alcance, esto estaba en sus manos, gracias a un cliente preocupado, atento y comunicativo.
Pero ojo: ese mismo cliente, hoy publica una vez más en su blog el problema, y ahora quien busque "Chocolate Ricard" en Google, verá que este tema es uno de los primeros resultados, y la foto del chocolate con gusanos es también de las primeras en Google Imágenes. Más todavía cuando Ricard no tiene sitio en Internet (si tu callas, hablan tus clientes por ti).
¿Para qué sirve el CRM y el marketing relacional si no hacemos nada con lo que aprendemos?
Pensaron seguramente en regalar una canasta de productos para "dejar contento" al cliente, pero se olvidaron del mundo interconectado y la web 2.0: Ahora no solo tienen contaminada una partida de chocolates, sino a todos los clientes que puedan escuchar sobre la marca en Internet.
Vuelvo a lo mismo: Hay que escuchar... y actuar!
[La imagen es parte del video del segundo gusano]
.
.
lunes, 11 de octubre de 2010
Teletransportación hasta La Pampa
Tan cerca y tan lejos. Vecinos y hermanos.
Mi relato de viajero comienza a las 8 de la mañana de un miércoles 6 de octubre y termina 40 horas después, regresando desde Tres Cruces a mí casa.
Para llegar a las oficinas de un cliente en La Pampa (Argentina) comencé con un remise hasta el Aeropuerto de Carrasco - nuevo, hermoso y moderno - luego un puente aéreo (¿puente?) hasta Aeroparque en Buenos Aires (que pronto será cerrado por unos meses para una puesta a punto) y de ahí un pequeño avión de Sol hasta la ciudad de General Pico - cabecera del departamento Maracó, en el noreste de la provincia de La Pampa.
En esa ciudad nos esperaba un taxi para conducir por 100 kilómetros hasta la pequeña ciudad de Realicó - casi en la frontera con la provincia de Córdoba.
La parte rápida parecía ser el avión de Montevideo (Canelones en realidad, no?) a Buenos Aires, ya que el avión sale a las 9.55 y llega a las 9.55 ... teletransportación? no, solo diferencia horaria entre dos países pegados pero diferentes.
Después de una tarde de trabajo, la cena en La Giralda y una breve noche de hotel, solo queda el regreso que debería ser la actividad inversa.
El vuelo hacia Aeroparque hace escala en Santa Rosa, así que se demora un poco más la llegada a Buenos Aires. El paro general en Uruguay me obligó a regresar vía Colonia por Buquebus (mezcla de barco con ómnibus, y por lo tanto fue pasada la medianoche mi llegada a Tres Cruces).
Aquello de que "La Pampa tiene el ombú" parece que no es cierto, pero realmente vi poco y nada de esta provincia argentina. Seguro tocará volver, y ya veremos.
[Foto a las hélices del pequeño avión de Sol]
.
.
Mi relato de viajero comienza a las 8 de la mañana de un miércoles 6 de octubre y termina 40 horas después, regresando desde Tres Cruces a mí casa.
Para llegar a las oficinas de un cliente en La Pampa (Argentina) comencé con un remise hasta el Aeropuerto de Carrasco - nuevo, hermoso y moderno - luego un puente aéreo (¿puente?) hasta Aeroparque en Buenos Aires (que pronto será cerrado por unos meses para una puesta a punto) y de ahí un pequeño avión de Sol hasta la ciudad de General Pico - cabecera del departamento Maracó, en el noreste de la provincia de La Pampa.
En esa ciudad nos esperaba un taxi para conducir por 100 kilómetros hasta la pequeña ciudad de Realicó - casi en la frontera con la provincia de Córdoba.
La parte rápida parecía ser el avión de Montevideo (Canelones en realidad, no?) a Buenos Aires, ya que el avión sale a las 9.55 y llega a las 9.55 ... teletransportación? no, solo diferencia horaria entre dos países pegados pero diferentes.
Después de una tarde de trabajo, la cena en La Giralda y una breve noche de hotel, solo queda el regreso que debería ser la actividad inversa.
El vuelo hacia Aeroparque hace escala en Santa Rosa, así que se demora un poco más la llegada a Buenos Aires. El paro general en Uruguay me obligó a regresar vía Colonia por Buquebus (mezcla de barco con ómnibus, y por lo tanto fue pasada la medianoche mi llegada a Tres Cruces).
Aquello de que "La Pampa tiene el ombú" parece que no es cierto, pero realmente vi poco y nada de esta provincia argentina. Seguro tocará volver, y ya veremos.
[Foto a las hélices del pequeño avión de Sol]
.
.
viernes, 8 de octubre de 2010
Modelos Económicos en Offside
Cuando alguien quiere vender una revista en papel en épocas del mundo virtual, parece retrasado en el tiempo. Más todavía si quiere que sea de buena calidad y de artículos extensos, cuando el mundo parece que fuera para el lado de la cultura de la comida rápida y el hacé la tuya.
Pero cuando combina eso de la revista papel, con las redes sociales, un blog, lectores en todo el mundo, paypal y precios diferenciales según el país de destino, más que retrasado parece estar en offside.
Es que el origen de toda esta locura está justamente en el blog de Hernán Casciari - un argentino que vive en España, y su blog está titulado tal como en el Río de la Plata pronunciamos esa posición adelantada en el fútbol (Orsai).
Hace unos días planteó la idea: una revista sin publicidad ni subsidios, con la mejor calidad gráfica, eliminando intermediarios, en papel y en formatos digitales, con escritores admirables, de frecuencia trimestral, con más de 200 páginas y con el precio variable según el país.
754 comentarios y 7 días más tarde contaba más detalles de la idea, y recibía otros 667 comentarios de sus lectores.
Hoy publica un nuevo artículo que plantea el modelo de determinación del precio de venta, y la forma de distribución que incluye a lectores que solicitan a su proveedor de libros que traigan la revista.
Es un modelo transpartente, que apunta a ser justo más allá de la relación entre el costo y el precio, cobrando un importe en realación al precio de venta de un periódico local.
Esto que se parece mucho al espíritu de La Diaria en Uruguay, no es una locura, ni es algo utópico, ni es desconocer los medios digitales... todo lo contrario. Es un modelo basado en el mundo de hoy, en las comunicaciones globalizadas, en la web 2.0, en las herramientas de distribución, en la colaboración online, en las redes sociales y de conocimiento, en las economías de escala, etc. etc.
Es un nuevo ejemplo de compatibilidad entre Internet y el mundo real, entre la economía y los ideales, entre los derechos de autor y la comunidad, entre lo gratuito y lo pago.
Para realmente evaluar una iniciativa como esta, hay que leer los comentarios en el blog, donde la gente se queja, apoya, analiza, construye e intenta destruir. De todo un poco, como en la web, como en los blogs, como en la vida misma.
[Imagen, extracto de la web de Orsai]
.
.
Pero cuando combina eso de la revista papel, con las redes sociales, un blog, lectores en todo el mundo, paypal y precios diferenciales según el país de destino, más que retrasado parece estar en offside.
Es que el origen de toda esta locura está justamente en el blog de Hernán Casciari - un argentino que vive en España, y su blog está titulado tal como en el Río de la Plata pronunciamos esa posición adelantada en el fútbol (Orsai).
Hace unos días planteó la idea: una revista sin publicidad ni subsidios, con la mejor calidad gráfica, eliminando intermediarios, en papel y en formatos digitales, con escritores admirables, de frecuencia trimestral, con más de 200 páginas y con el precio variable según el país.
754 comentarios y 7 días más tarde contaba más detalles de la idea, y recibía otros 667 comentarios de sus lectores.
Hoy publica un nuevo artículo que plantea el modelo de determinación del precio de venta, y la forma de distribución que incluye a lectores que solicitan a su proveedor de libros que traigan la revista.
Es un modelo transpartente, que apunta a ser justo más allá de la relación entre el costo y el precio, cobrando un importe en realación al precio de venta de un periódico local.
Esto que se parece mucho al espíritu de La Diaria en Uruguay, no es una locura, ni es algo utópico, ni es desconocer los medios digitales... todo lo contrario. Es un modelo basado en el mundo de hoy, en las comunicaciones globalizadas, en la web 2.0, en las herramientas de distribución, en la colaboración online, en las redes sociales y de conocimiento, en las economías de escala, etc. etc.
Es un nuevo ejemplo de compatibilidad entre Internet y el mundo real, entre la economía y los ideales, entre los derechos de autor y la comunidad, entre lo gratuito y lo pago.
Para realmente evaluar una iniciativa como esta, hay que leer los comentarios en el blog, donde la gente se queja, apoya, analiza, construye e intenta destruir. De todo un poco, como en la web, como en los blogs, como en la vida misma.
[Imagen, extracto de la web de Orsai]
.
.