Gabriel Budiño

sábado, 11 de septiembre de 2010

Tu no puedes ser mi profesor

Hoy tenemos la oportunidad de reinventarnos. Las empresas en sus relaciones con los clientes, el Estado para sus ciudadanos, los docentes y alumnos, y también en nuestras relaciones interpersonales.

Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) nos ofrecen una plataforma que puede servir como oportunidad, desafío, amenaza o todo junto (y más). Está en cada uno de nosotros ver qué tomamos y qué descartamos. Pero ésta no es una decisión en solitario: en las comunicaciones siempre hay dos partes, los clientes nos exigen, los competidores marcan el camino, los ciudadanos demandan, los estudiantes esperan de nosotros. ¿Acaso se puede vivir a contramano?

Este video nos enfrenta a esa realidad ¿futura?:



Mantenerse lejos del correo electrónico, los mapas digitales, el intercambio en foros, el acceso a la información en la web ¿es una opción? ¿cuánto tiempo podremos mantenernos solo por teléfono? ¿cuánto tiempo podremos sostener la enseñanza desde un conocimiento propietario y exclusivo de un docente-sabio?

Veamos este otro video que habla de estos nativos (náufragos) digitales y lo que aprenden con los videojuegos e Internet:



Necesitaremos recrearnos, repensarnos, reinventarnos. ¿cuál es nuestro rol docente? ¿cuál es nuestro rol de expertos? ¿cuál es nuestro rol como proveedores? ¿cuál es nuestro rol como Estado? Los objetivos quizás sigan siendo los mismos, pero los medios han cambiado, el contexto cambió, nosotros cambiamos, ellos cambian... Nada será lo mismo.

Deberemos crear nuestros Entornos Personales de Aprendizaje (PLE), nuestra plataforma de operaciones en la web, nuestro camino.
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6 comentarios:

  1. Tiene y no tiene que ver. Hace unas semanas descubrí SUMÁ, una especie de banco de ideas. Paradójicamente era una idea que hace mucho tiempo yo tenía (y que sigo teniendo, porque no me termina de gustar SUMÁ). De cualquier forma, puse mi idea -todavía no está online- de reformular todo el sistema de enseñanza nacional pública. Básicamente (nada nuevo por cierto)se trata de un elemento de tres patas.

    Por un lado, que cada centro educativo reciba un aporte anual en $ dependiendo de la cantidad de niños y del contexto sociocultural del mismo. Parece claro que los recursos que debemos invertir como Estado son mayores en una escuela superpoblada de un barrio de contexto crítico, que en una escuela (o liceo) con 20 chicos por clase y en un barrio de clase alta.

    La segunda pata del sistema son los Directores de cada centro. Ellos -y solo ellos- utilizarán como quieran ese presupuesto. Por supuesto que deberán contratar docentes (y ahí se les irá bastante del mismo), pero quizás tengan realidades diferentes y soluciones diferentes también. Quizás no se contraten limpiadoras y se haga a los chicos limpiar la escuela, para que también comprendan que es su espacio. Quizás en vez de una huerta orgánica lo que se necesitan son piscólogos, o un club, o una clase de guitarra, etc, etc, etc. Estos Directores durarán en su cargo x años (4 supongamos) y serán elegidos (y no concursados) entre los padres del centro. Así, si un Director fue pésimo en su administración de recursos y en sus opciones, los padres podrán elegir a otros. Por supuesto el MEC y ANEP tendrán su voto también.

    Por último, los docentes. Se elimina el sistema de elección de horas docentes, y pasa a ser -como todo en la vida- un libre campo de oferta y demanda. Se marcará un ingreso mínimo por hora, pero cada docente (y cada Director) podrá negociar su salario. Y, por supuesto, elegir dónde trabajará. Hoy en día el sistema hace que los más experimentados sean los que elijen primero las horas. Y generalmente, optan por aquellas escuelas y liceos menos complicados. Dejando, entonces, a los recién graduados (que cuentan con menos herramientas educativas) trabajando en los centros más complicados. Y esto no solo afecta a los docentes, sino a los centros educativos. Cambiando el sistema, un Director de un centro podrá ofrecer mejores sueldos y así "tentar" al docente experimentado por ejemplo.

    Y acá sí se une con tu tema: todo esto lleva a que los docentes necesiten contínuamente formarse. Por qué? Porque básicamente con una mejor formación se puede acceder a negociar mejores salarios. Y aunque sea solo por eso (y no por llevar una mejor educación por ejemplo) ya el sistema mejora. No podrán existir más las maestras que no sepan utilizar una computadora, o que le tengan miedo a facebook, o que no sepan utilizar google maps, porque serán las que no las quiera contratar nadie. En cambio aquellos que se actualicen, que se sigan formando, que se mantengan siempre up to date (como por otra parte hace el resto de los trabajadores), serán también los que puedan negociar mejor.

    Pero hoy, por más plan Ceibal de por medio, me parece que es el sistema que atenta contra la formación. Porque no se la fomenta... simplemente hay que ser maestro por mucho tiempo y nada más.

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  2. Gracias como siempre Fede por los aportes (deberías volver a tener tu blog)...

    justo hoy los gurises de SUMA.org.uy estuvieron en Dosmil30 en El Espectador, así que la nota estará seguramente mañana publicada aqui

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  3. Eso sí Fede, no comparto ninguna de tus tres patas... jeje

    Creo que la distribución de recursos se debe hacer centralizada en base a políticas nacionales, experiencias compartidas, programas, aprovechando sinergias y optimizando la gestión.

    No creo que sea conveniente que los padres elijan a un director, creo que se requieren capacidades profesionales... la elección directa es de autoridades, y no de especialistas... la dirección de una institución educativa no es una gerencia, es una dirección técnica.

    Tampoco creo conveniente el libre juego del mercado laboral... igual trabajo exige igual remuneración.... podemos hacer remuneraciones diferenciadas, pero sobre reglas claras y no por oferta y demanda, cosa que ya es sabido no lleva a ninguna parte y fomenta las desigualdades.

    La remuneración es y debe ser por escalas de grados. Eso sí, la calificación no debe ser solo por años, sino por evaluación de los docentes y formación permanente.

    Obviamente esto que digo no es una defensa a lo que hay hoy, pues hoy no hay esto que digo :)

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  4. No me parece bien que a igual trabajo igual remuneración. Porque no es justo que un recién egresado gane lo mismo que un profesional que hace 30 años que trabaja, que se ha formado paralelamente para tener otras herramientas educativas. La regla es clara y siemple: el mejor (quizás) cobrará más. En casi ningún rama del mercado existe esa premisa. Los gerentes no ganan igual en todas las empresas, los secretarios no ganan igual en todas las empresas, los jugadores no ganan igual en todos los equipos. No entiendo por qué todos los docentes (sin importar su experiencia o formación) deben ganar lo mismo. De esa forma -y como son los docentes los que elijen las horas- un mal docente (pero viejo) ganará lo mismo que un excelente docente (pero recién graduado). O inclusive más.

    Los padres no pueden participar en la elección del Director? No veo por qué no, al final son sus hijos (y no necesariamente los del director) los que desaprenden si sus políticas son malas. Hoy es un tema de carrera y no de capacidades. Y ya vemos a dónde nos ha llevado :)

    Pd.: Ya volverán los tiempos de blogs... necesito un buen nombre :)

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  5. Dentro de una misma organización, a igual trabajo corresponde igual remuneración... los docentes de mayor grado reciben mejor remuneración, los docentes asignados a roles complejos se les paga mas, eso es correcto... pero que dos directores de dos liceos compitan ofreciendo un salario mayor para quedarse con un docente, es horrible.

    "Aquellos tiempos de los blogs" es un buen nombre :)

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